Versos caídos

Un hombre planta
su voz en los lectores
y la vida camina
lento, signando
bocanadas de instantes.
Los interiores faltos
de silencio
columpian asideros
como rectángulos
partidos en la estrategia
indemne, locuaz, perspicaz.
Lejos, el manantial de lenguas
esculpe su desembocadura
en los espacios
que de viejos nombran
el origen de las cosas.
Babel desperdigada
intentona de versificar
la inclemente faz
de los ausentes.
El versificador mutila
en sus adentros
la pieza fugitiva
de sus entrañas.