
Cobija esta memoria
deseos y esperanzas
entreveradas con soles
en el remanso fugaz
que son las ausencias.
Soledades inscriben
una faz doliente
en el simbolismo
cromado por amores,
amistades y muertes.
¿Cuán larga es
la manta del recuerdo
en este capricho
como velo de flama
en la oscuridad?
Una larga urdimbre
que cesa inmediata
compone los saberes
positivos de una edad
descolocada en destiempo,
síncopa de flujos y modas,
como marea de río
en la barra de la laguna
que es una vida
columpiada entre crisis
y nervaduras de alegría.
Florecer contra el instinto
politizado en esperanza
más que una ideología
certera un retoñar
con los tiempos y los soles
si rendija de cicatrices
por amores y quebrantos
también explosión de dicha
en la guerra de esta pesadilla
inundando de una calma
no vencida la tenaz insignia
de lo posible. Anterior
al mecanismo diluido
de nombrar inconsciente
personajes y hazañas
fábrica de fuegos y cariños
esta flor en espera
de un reverdecer en el horizonte.